La última cena.
Después del partido en Vallecas, todo parecía indicar que Quique Setién tenía las horas contadas. Ya sabemos de la división de la grada. Y no diríamos la verdad, si dijéramos que a favor o en contra, todos lo hemos negado más de tres veces. Y seguramente que más de uno ya habrá besado al técnico cántabro.
Semana de pasión.
Que esta semana en la ciudad, no es cualquier semana, no lo vamos a descubrir. Pero estos días de pasión, para los béticos, ha sido un poco más difícil por esa triste derrota en el campo del eterno rival. Derrota quizás no justa, pero derrota y ahora solo toca levantarse.
Y al tercer día resucitó después de ser crucificado.
Cierto es que en los últimos tres encuentros de liga, se ha notado cierta mejora en el juego del conjunto verdiblanco, después de haberlo dado prácticamente por “muerto». Pero siguen sin llegar los resultados. Tres puntos de nueve en estos citados partidos se hace insuficiente para lograr el objetivo.
Y la fe parece cada vez más débil en la hinchada verdiblanca, porque cada día que pasa más lejos está el objetivo. Aunque la fe sería más grande si volviese el gol. Ese que tanto ha faltado durante toda la campaña.
Mañana domingo de resurrección a partir de las 20:45, es el momento. Es de esos partidos en los que hay que resucitar. Un gran rival, un rival que nos ha eliminado de la Copa y que hay que ganar si o si para volver a estar en la pomada.
En lo deportivo es baja en el conjunto ché Kondogbia. Y son dudas Jaume y Piccini, aunque los valencianistas recuperan a Garay y Rodrigo. Los de Marcelino vienen de eliminar al Villarreal en un partido cómodo en Mestalla gracias a la ventaja de la ida. Y en liga vencieron al Levante por 3-1, lo que le hacen un serio candidato a la cuarta plaza. De las armas del Valencia no hace falta hablar mucho, porque la hemos sufrido en carne, y todo hace esperar que no cambien mucho su discurso. Esperamos que Quique y los suyos, tengan en cuenta el juego y las contras que tanto daño nos hicieron en la Copa. Porque una derrota dejaría muy tocado al conjunto bético, y muy lejos de sus aspiraciones.
Por parte del conjunto de la palmera, son dudas William Carvalho y Canales. El primero prácticamente descartado. Ocuparía su lugar el murciano Javi García. El segundo tuvo molestias en el entreno de ayer en su maltrecho tobillo.
El once puede ser el formado por Pau en portería, carriles para Emerson, que poco a poco se está afianzando , y a Júnior, al que se le ha echado mucho de menos. En el centro de la defensa, Mandi, Sidnei y Feddal. Veremos si Bartra que no está pasando por su mejor momento, vuelve a estar en el banquillo. La baja casi segura del portugués la cubriría Javi García acompañado por Guardado y el recientemente fichaje en propiedad, el argentino Gio Lo Celso. La duda está en Canales, si finalmente no juega puede que sea Joaquín el que haga de enganche con un Jesé, que aunque el pasado sábado no tuvo su día de cara a puerta, esta cuajando buenas actuaciones.
Y para terminar quiero recordar a un “romano» que usó sus palabras para el pueblo bético. Y decirle que el capirote de los béticos siempre va estar arriba, en todo lo alto. Porque el pueblo está creciendo, y siendo exigentes, siempre apoyaremos al REAL BETIS BALOMPIÉ, en las buenas y en las malas. Y ante esta afición, la mejor afición de la “ciudad del Betis», ya sabe usted lo que hay que hacer.
