Partido de necesitados el de ayer en la Rosaleda, que se saldó con victoria verdiblanca por 0 a 2. De esta forma, los de Setién cogen aire y se alejan de los fantasmas del descenso, mientras que el Málaga pasará el fin de año en zona de descenso aun consiguiendo la victoria contra el Alavés.
Empezamos por el equipo local. Michel dispuso una alineación 4-4-2 formada por: Roberto, Rosales, Luis Hernández, Baysse y Diego González, Keko, Recio, Adrián y Castro en la medular, y Peñaranda y Bastón en la delantera. El Málaga cedió la posesión al Betis y quiso esperar su oportunidad manteniendo el orden y defendiendo con dos líneas de 4. Michel, sabiendo el patrón de juego del Betis, quiso adelantar sus líneas para presionar la salida de balón, lo que obligó a Adán a sacar en largo en más de una ocasión, pero tampoco hizo una presión asfixiante. Sus mejores ocasiones vinieron a balón parado, pero sus remates no fueron certeros. La lesión de Adrián cuando se llevaban 40 minutos de juego, posibilitó que entrara Diego Rolán, otro delantero, lo que hizo que el Málaga pasará a jugar con un 4-3-3, con Keko y Castro como interiores. No por ello el Málaga generó más y vio como el Betis metía el segundo a la salida del descanso y contemporizó el partido hasta el pitido final.
Por su parte, Setién ante la multitud de bajas que asolan al club bético, tuvo que experimentar con un centro del campo novedoso. La alineación fue la siguiente: Adán, Barragan, Mandi, Feddal, Durmisi, centro del campo con Amat, Camarasa, Fabián, Joaquín y Tello, y en la delantera Sergio León. El esquema fue un 4-5-1, teniendo como gran novedad a Amat como pivote defensivo, papel que cumplió con creces, ayudando mucho a sus compañeros y asociándose bien. Al igual que se vio en el Atlético, Fabián volvió a optar por caer a las bandas (sobre todo a la derecha) para ayudar a la salida de balón, lo que también permitía que Mandi o Feddal tuvieran espacio para subir el balón y romper la línea de presión. Mención especial para Joaquín, que se movió por toda la zona de ataque, para romper por el medio y filtrar algún pase. Y así fue el primer gol, jugada elaborada de banda a banda que llega a Joaquín, recorta hacia dentro y mete un pase entre los centrales que Sergio León no desaprovech´p.
Una cosa que ha vuelto a recuperar el Betis es la presencia de sus laterales en ataque. Tanto Durmisi como Barragán fueron capaces de prodigarse ofensivamente. Y una muestra de ello fue el segundo gol, obra de Camarasa. Jugada de toque de banda a banda, que recoge Barragán el balón para asistir en el segundo palo al «8» del Betis.
El Málaga sacó todo tu potencial ofensivo con En Nesiry y Ontiveros, que probó algún disparo lejano que puso en algún aprieto. El Betis siguió fiel a su estilo, aunque tuvo que ponerse el mono de trabajo en labores defensivas ante un Málaga que lo intentó con más corazón que cabeza. Aun así, fue capaz de generar alguna ocasión de peligro para poner más ventaja en el partido. El resultado ya no se movió más y los tres puntos se vinieron para Sevilla.
Buen partido de los verdiblancos, que el viernes tienen otra prueba de fuego ante tu público que examinará su mejoría.
