Valoraciones del Leganés 4 – Real Betis Balompié 0

Es imposible valorar el partido de ayer. La imagen del equipo no merece hacer ningún tipo de análisis, sólo levantarse de una vez, protestar y exigir para que esta situación cambie. Ya está bien de aguantar humillaciones, de que se arrastre el escudo, de ensuciar el nombre de esta centenaria entidad. Jugadores que no sienten los colores, entrenadores incompetentes, una directiva nefasta preocupada en no perder su sillón. Ya está bien.

El Betis necesita una revolución en todos sus estamentos, de cabo a rabo. Airear toda la mierda que le rodea, acabar con los famosos entornos e influencias de plataformas y fundaciones que dañan y perjudican al Betis. Con Lopera el beticismo se echó a la calle, pero es que la situación de ahora pide una acción más o menos igual. Toca reaccionar, toca tomar decisiones por y para el Betis. Porque si ellos son incapaces de tomarlas, habrá que hacerlo aquellos que si nos duele el Betis.

Tenemos el peor presidente de la historia del Betis y al peor entrenador de la historia del Betis. En vez que crecer, vamos a peor. Se nos ha vendido un proyecto que en sólo una temporada se ha venido abajo. Ya está bien de engañar al bético.

No hay alma, no hay sangre, no hay amor con unos colores, ni el más mínimo respeto por un sentimiento. Mientras tanto, el beticismo está hundido, perdido y sin esperanzas de que esto cambie. Hemos sufrido descensos, temporadas muy malas, humillaciones en los derbis, pero esto ya ha tocado fondo, no ahora sino hace mucho tiempo. Salir vapuleado de cada estadio, goleado por equipos con teóricamente peor presupuesto, un equipo que no juega a nada, que no tiene estabilidad, que no se sustenta.

Es el momento de dirigir nuestras miras a los responsables de esto. Mostrar nuestra opinión y que se nos escuche. El Betis necesita un cambio, empecemos a cambiarlo nosotros.